Gerikö nos sumerge en su debut emocional con ‘Primitivo’

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Embarcándose en un viaje introspectivo, el productor musical Gerikö nos sumerge en su álbum debut, ‘Primitivo’, una obra que emociona al representar su evolución personal desde la adolescencia hasta la búsqueda de la conciencia del ser y un despertar espiritual.

‘Primitivo A’ materializa musicalmente este proceso, equilibrando la vulnerabilidad con el amor propio y la creencia en uno mismo, siendo un regalo para el Geriko adolescente. En esa etapa no evolucionada, dedicó esfuerzos significativos para descubrir quién era, quién deseaba ser y cómo se relacionaba con los demás.

Inspirado por la reciprocidad hacia el arte y la música que lo moldearon, Gerikö ha tejido un mensaje perdurable en el tiempo, dejando una huella profunda en el alma del oyente. El álbum no solo simboliza esperanza y agradecimiento por el aprendizaje, sino que también representa una obra maestra de conexión emocional.

Desde 2016 hasta 2022, el proceso de creación del álbum se gestó, con la producción iniciada en marzo de 2023. Grabado en un estudio personal construido en el segundo piso de su departamento, Gerikö no solo compuso todas las canciones, sino que también tocó una variedad de instrumentos, desde voces hasta guitarras, bajos, synths y más. Este viaje musical trasciende el tiempo y resuena con la autenticidad de un artista entregado a su pasión.

‘Primitivo A’, la primera parte de este álbum, se destaca por la colaboración de talentosos músicos como Juan Fernando Torres Cateriano, Yoryi Caruso, Julio Pereyra y Willie Delgado en la batería, Francesco Bernasconi y Maylo en los teclados, Jana Paredes en los violines, y Leo Barraza en los cellos. Las colaboraciones son un punto destacado, con Francesco Bernasconi co-autorizando y participando en ‘Momoko’, y Américo Parra aportando voces, guitarras, kenas y kenachos en el emotivo feat ‘Canta Libre’.

La producción, incluyendo la coproducción con Pau the kid en ‘Humo de Flor’ y la masterización final en Valencia, España, contribuye a la diversidad ecléctica del álbum, que fusiona géneros como videojuegos, city pop japonés, huayno, cueca chilena, Lofi y elementos urbanos. La obra visual primitivista de la portada, creada por Nicolás Guerra García y diseñada por Luana Guerra García, Iki Thourte y Gerikö, junto con la campaña visual de la fotógrafa Karuna María, completa la experiencia multisensorial de esta obra artística.